El lupino es una planta muy decorativa gracias a sus racimos de flores vistosos y llamativos. Pueden ser de diversos colores, desde el blanco o el rosa hasta colores más vivos como el violeta o el azul. Su aspecto elegante hará que tu jardín o patio se embellezca. Si deseas añadir lupino a tu jardín ornamental, presta atención al siguiente artículo. En unComo.com te explicamos cómo cultivar lupino. Conoce las diversas variedades y especies de la planta, elige la que más desees y cuídala en tu jardín.
Pasos a seguir: 1Espacio e iluminación. El lupino requiere estar ubicado en un lugar donde le de la luz del sol con toda su plenitud o bien un espacio de sol y sombra. No obstante, procura que estén protegidas del viento.
2Tierra. El lupino no necesita una tierra excesivamente fértil, pero sí requiere un suelo ácido para su crecimiento. Además, debe plantarse en una tierra que drene bien. Recuerda: comprueba que la tierra de tus lupinos es la adecuada, en caso contrario, puedes añadir sulfuro o musgo para así ajustarte a la acidez que requiere el suelo de la planta.
3Plantación. Lo más recomendable es plantar los lupinos durante la primavera. Puedes plantarlos en macetas. Deberás regarlo nada más plantarlo para humedecer el suelo. Si estás pensando en cultivar más de una planta, deja un pequeño espacio entre ellas para que crezcan sin molestarse las unas a las otras.
4Riego. El lupino requiere ser regado de manera regular, puesto que necesitan que la arena esté húmeda continuamente y sufrirán en caso de que la tierra se seque. Por otro lado, si bien no es necesario el uso abundante de fertilizante, es adecuado aplicar una cantidad ligera de este producto cuando el lupino empiece a dar los primeros brotes.
5Plagas. Los lupinos pueden sufrir problemas con los pulgones o el oídio de la vid. Para evitar y controlar las plagas deberás utilizar un pesticida líquido. Encontrarás el adecuado en cualquier jardinería o vivero. En caso de que tu lupino se contagie de algún virus, te recomendamos destruirlo.
6Floración. El lupino empieza a florecer a principios del verano. Para que crezcan saludables y fuertes, observa la planta a diario y retira las flores marchitas y las raíces muertas que observes. Además de favorecer al lupino evitarás que la especie se reproduzca y extienda sin control. También puedes conservar las semillas de las vainas en frascos y en un lugar fresco para plantarlos al inicio de la primavera.