El mijo es un grano alimenticio altamente nutritivo que es un secreto bien guardado. Es ligeramente dulce con un sabor a nuez y está repleto de nutrientes esenciales. El mijo, una hierba que produce granos comestibles de tamaño pequeño, es el cultivo alimentario más antiguo que se conoce, data del año 6000 a.C. [fuente:Asbell]. El grano es alto en proteína, fibra, vitamina B, hierro y calcio, y es el sexto cultivo de grano más importante del mundo, sustentando a un tercio de la población mundial. Es el cultivo principal en muchos países africanos, debido a su adaptabilidad para crecer en climas secos y áridos. El mijo no contiene gluten y, por lo tanto, puede ser consumido por personas con dietas restringidas y por personas alérgicas al gluten. El tipo de mijo más popular es el mijo perla [fuente:Raily]. Entonces, ¿por qué no aprender a cultivar mijo y encaminarse hacia una dieta saludable?
- Elija una parcela para plantar mijo que tenga mucha exposición al sol.
- Prepare el suelo para plantar aplicando fertilizante rico en nitrógeno en el suelo.
- Plante las semillas individuales a una distancia mínima de 5 centímetros (2 pulgadas) entre sí. Cubre las semillas con al menos una pulgada (2,5 centímetros) de tierra. Las hileras de semillas deben tener al menos 12 pulgadas (30,5 centímetros) de separación.
- Agregue compost adicional o fertilizante rico en nitrógeno al suelo a medida que crece el mijo. Esto es necesario porque el mijo extrae mucho nitrógeno del suelo.
- Coloque mantillo alrededor de las plántulas para ayudar a retener el agua.
- No riegues tu mijo. La lluvia promedio normal debería ser suficiente para el crecimiento del mijo, por lo que no es necesario regar más.
- Coseche su mijo cuando las hierbas y las semillas se hayan vuelto doradas [fuente:Heirloom Organics].