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Cómo cuidar una planta carnívora

Actualmente, las plantas carnívoras están cada vez más presentes en nuestros jardines y patios. Su misterio, atractivo, mecanismos y comportamientos hacen de ellas plantas especiales. Cuidarlas para que crezcan sanas y espléndidas es muy sencillo, pues las plantas carnívoras son muy resistentes y no requieren muchos cuidados. Pero si tienes dudas, presta atención a este artículo. En unComo.com te enseñamos cómo cuidar una planta carnívora y mantenerla en buen estado en nuestro jardín.

Pasos a seguir: 1

Verifica qué tipo de planta carnívora tienes. Hay una amplia variedad de especies, pero las más comunes son las tropicales, que necesitan mucha humedad y una temperatura elevada, y las no tropicales, que son más resistentes a las temperaturas frías y se consideran más salvajes.

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Sitúa la planta en un lugar adecuado. Debes tener en cuenta el tipo de clima que necesita para ello.

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Si has comprado la planta pequeña, lo ideal es plantarla en una maceta y cubrirla con un plástico. Esto hará que se encuentre como en un invernadero. Recuerda que al principio de su crecimiento, las plantas carnívoras son muy delicadas, por lo que debes tener muy presente el tipo de clima adecuado. En menos de un mes, podrás liberarla del plástico y dejar que crezca al aire libre.

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Cuando la plantes, añádele arena pobre y tierra gruesa. Recuerda: la tierra debe contener esfagnos -musgo de pH ácido- que la nutrirá. Existen arenas especiales para plantas carnívoras, puedes consultarlo en un vivero.

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Si tu tipo de planta es tropical, recuerda que precisará grandes cantidades humedad y luz. Por ello, es recomendable que añadas agua destilada o bien de lluvia bajo el plato de la maceta. Conviene revisar con frecuencia que el plato contenga agua. Recuerda: durante los meses de verano pulveriza con agua la planta carnívora a menudo.

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En cuanto a la luz, evita exponer tu planta directamente a los rayos del sol. Aunque requieran cantidades de luz, igual que otras muchas plantas, no es recomendable que el sol les llegue de manera directa.

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Si tu planta carnívora es de interior, deberás alimentarla tú mismo. Puedes dejarla una vez al día al aire libre para que ella misma capture los seres vivos con los que se nutre. En caso de que no sea posible, deberás proveerla de insectos tales como: hormigas, moscas, arañas pequeñas o polillas. Recuerda: las plantas carnívoras pueden autosustentarse durante periodos breves de la fotosíntesis, aunque lo más aconsejable es que capturen los alimentos en el exterior.

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¡Cuidado con las plagas! Los parásitos suelen atacar a las plantas carnívoras. Si deseas evitarlo, ves regulando la temperatura y la humedad a la que se exponen. También es conveniente que retires las hojas muertas con rapidez.

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Si tu planta ya se ha contagiado y los parásitos han conseguido atacarla, puedes actuar usando alcohol isopropílico, que actuará como un insecticida y acabará con la plaga.