Con el tiempo las paredes de casa como las de cualquier edificio, van sufriendo rozaduras, agujeros, boquetes, etc. De vez en cuando es necesario pintar, pero además debemos reparar estos pequeños signos que imprimen a la vivienda una imagen descuidada. Para dejar la pared en perfecto estado antes de pintar, te explicaré cómo restaurar las imperfecciones de la pared de un modo sencillo, rápido y económico.(Foto: Mónica Lou)
Necesitarás:Dirígete a un establecimiento de pinturas o a una ferretería y compra masilla para reparar paredes; la más conocida es el “Aguaplast”.
2Lee las instrucciones del envase. Hay diferentes tipos de Aguaplast; algunos requieren secado previo para lijar y otros no.
3Evita emplearla en grietas muy grandes u orificios excesivamente profundos. Para esto casos, es mejor emplear algún tipo de cemento con agua.
4Comprobarás que esta masilla es muy práctica porque es de secado rápido, es limpia y prácticamente inholora.
5Aplica la masilla con un espátula, rellenando bien la zona a reparar y evitando que quede aire dentro. Deja la superficie todo lo lisa que puedas para tener que lijar lo menos posible.
6Si el orificio tiene cierta profundidad es posible que tengas que aplicar la masilla varias veces, pues al secarse puede contraerse ligeramente.
7Pasa una lija de grano fino, de 120 aproximadamente. Dependiendo del tipo de masilla que hayas adquirido deberás hacer este paso con la masilla todavía fresca o una vez seca.
8Asegúrate de que esté completamente seca antes de pintar; de lo contrario no absorberá bien la pintura.
9Es probable que tengas que aplicar 2 capas de pintura hasta igualar el color de la pared.