La sandía es una fruta de verano refrescante, dulce y jugosa. Si tienes mucho espacio en el jardín, puedes cultivar sandías. Plantar sandías es un trabajo delicado. Si las plantas demasiado pronto, corres el riesgo de que la tierra esté demasiado fría, y si las plantas demasiado tarde, es posible que las sandías no tengan suficiente tiempo para madurar. Hay dos tipos de sandías. La variedad estándar es oblonga y pesa entre 20 y 30 libras (9 y 13,6 kilogramos). Las variedades baby o bush son redondas y pesan entre 2 y 10 libras (0,90 y 4,5 kilogramos).
- Coloca las semillas en macetas pequeñas unas tres semanas antes de plantarlas al aire libre. Mantenga las macetas en el interior. No todas las semillas germinarán.
- Riega tus plántulas con regularidad y mantenlas a una temperatura de 80 a 85 grados Fahrenheit (27 a 29 grados Celsius).
- Plante su sandía afuera cuando ya no haya peligro de heladas. Las sandías se deben plantar en un suelo que esté tibio a unas pocas pulgadas (centímetros) por debajo de la superficie. Puede colocar mantillo en el suelo para mantenerlo caliente.
- Empuja la tierra con una azada para formar montículos de al menos 2 pulgadas (5 centímetros) de altura. Aquí es donde plantarás tus plántulas de sandía.
- Haz un pequeño agujero en cada montículo con una pala. Coloque sus plántulas en el agujero. Deje al menos 6 pies (183 centímetros) entre plántulas.
- Extienda una fina capa de fertilizante alrededor de las plántulas.
- Riega las plántulas regularmente. Las sandías tardarán entre 80 y 90 días en madurar.
- Recoger las sandías cuando la parte que está en el suelo se vuelva amarillenta.