Es importante saber qué tan profundas son las raíces de la gardenia antes de mover, trasplantar o plantar una nueva gardenia. A las gardenias no les gusta que les molesten las raíces. Si trasplantas una gardenia en el jardín al aire libre, prepárate para cuidarla durante varios meses hasta que se asiente en su nueva ubicación.
¿Qué tan profundas son las raíces de Gardenia?
Las gardenias se consideran arbustos de raíces poco profundas. Esto significa que sus raíces se extienden y permanecen cerca de la superficie, en lugar de crecer profundamente en la tierra. Una buena comparación es pensar en él como un arce en lugar de un roble. Si alguna vez ha cultivado un arce, probablemente haya notado que las raíces permanecen muy cerca de la superficie; puedes ver una red de raíces leñosas llenas de baches cerca de la base del árbol. Por el contrario, un roble echa raíces más bien hacia abajo, y no verá tantos cerca de la superficie. Las raíces de Gardenia no se notan como las de un arce; lo importante es saber que las raíces se ramifican hacia afuera, en lugar de hacia abajo, debajo de la superficie del suelo.
No hay una respuesta definitiva a la pregunta "¿Qué tan profundas son las raíces de gardenia?" ¿Seis pulgadas? ¿Diez pulgadas? La respuesta varía con el tamaño de la planta. Un espécimen maduro de varios pies de altura tendrá raíces más profundas que una plántula, por lo que no hay una respuesta correcta.
Aplicando este conocimiento
Es importante aprender el hábito de crecimiento de una planta, como la profundidad de crecimiento de las raíces. Puede ayudarte a cultivar con éxito una gardenia u otro arbusto.
Humedad
Conocer este simple hecho también lo ayuda a comprender por qué las gardenias no pueden tolerar las sequías y necesitan un suelo constantemente húmedo. Las plantas con sistemas de raíces superficiales tienden a necesitar más agua, especialmente agua superficial. Dado que el sistema de raíces de las plantas bebe el agua y los nutrientes del suelo, solo pueden acceder a aquello con lo que están en contacto. Una planta que echa raíces profundas puede sobrevivir mejor a las sequías; sus raíces pueden aprovechar la humedad muy por debajo de la superficie y soportar períodos más largos entre lluvias. No así para la planta de raíces poco profundas, que necesita suelo húmedo. Si el suelo alrededor de las raíces se seca, un arbusto de raíces poco profundas, como la gardenia, experimenta un gran estrés e incluso puede morir.
Para evitar que la tierra se seque, riega con frecuencia. Aplique una capa gruesa de mantillo alrededor de la planta. El mantillo no solo evita que el agua se evapore, sino que también suprime las malas hierbas.
Trasplante
Si comprende la estructura de la raíz de la gardenia, también puede utilizar este conocimiento a su favor al trasplantar el arbusto. Para mover una gardenia, cava primero el nuevo hoyo. Cava el hoyo tan ancho como el arbusto maduro y tan profundo como el ancho. Antes de cavar con tu pala o azada, prueba algunos golpes de exploración alrededor del perímetro del arbusto. Si golpea las raíces, salga incluso más ancho que el propio arbusto. Cuanta más tierra pueda desenterrar alrededor de la planta cuando la trasplante, menos perturbará el sistema de raíces y más feliz será la planta. Excave con mucho cuidado alrededor de toda la gardenia, luego excave tan profundamente como sea necesario para desenterrar el sistema de raíces principal. Lleva un poco de la tierra vieja contigo al nuevo hoyo de plantación. Asegúrese de apisonar (presionar) la tierra alrededor de la gardenia trasplantada con cuidado. Riegue a fondo, cubra con mantillo y riegue el arbusto diariamente hasta que aparezcan signos de un nuevo crecimiento.
Los sistemas de raíz varían
Por último, aunque los libros y artículos sobre plantas pueden estimar la profundidad de las raíces, cada planta es única. El sistema de raíces puede variar entre plantas incluso dentro de la misma especie. Excave con cuidado y observe dónde aparecen las raíces en el suelo, y sea muy cuidadoso al replantar o trasplantar gardenias. Dale a la planta un poco de cariño después de pasar a cuidarla durante la transición. Es posible que se enfurruñe y se niegue a florecer el primer año después de moverlo, pero si se lleva con éxito a la nueva ubicación, debería recuperarse.