La flor de Pascua, cuyo nombre científico es Poinsettia o Euphorbia pulcherrima, se conoce popularmente como la planta de Navidad o flor de Navidad. Se trata de una planta típica en muchos países durante las fiestas navideñas. Destaca por tener unas brácteas grandes rojas que proporcionan un aspecto muy vistoso a sus flores, además de un tamaño considerable y una tonalidad muy viva. Al ser conocida como la planta de Navidad, muchas personas consideran que la flor de Pascua es de temporada y, después de las fechas navideñas, se deshacen de ella. Sin embargo, puede sobrevivir después de la floración y volver a florecer en temporadas posteriores si recibe los cuidados pertinentes, como por ejemplo el trasplante.
Para descubrir cómo trasplantar una flor de Pascua, cuándo se debe realizar y los cuidados que necesita, en unCOMO te recomendamos que sigas leyendo este artículo.
Cuándo se puede trasplantar la flor de Pascua
¿Te preguntas cuándo trasplantar la flor de Pascua? Pues bien, para determinar el mejor momento para trasplantar la flor, debes tener en cuenta que durante el invierno pierde las hojas y las flores porque no las necesita, aunque ello no implica que la planta muera. Realizando una cuidadosa poda, la flor de Navidad gozará de un tiempo de reposo hasta alcanzar la primavera. Así pues, con la llegada de la primavera, puedes trasplantar la flor de Pascua añadiendo sustrato nuevo adecuado para favorecer el desarrollo de nuevos vástagos. Estos vástagos crecerán durante los meses de verano y de otoño. Aunque si acabas de comprar la planta, una buena opción es trasplantarla a una maceta más adecuada con un sustrato de calidad.
La flor de Pascua se vende mucho en época navideña y a un precio realmente económico, por lo que el sustrato que contiene está elaborado para mantenerla durante poco tiempo. Por ello, es importante trasplantarla pese a que es un proceso más agresivo de lo habitual al encontrarse en un momento de máxima floración. Si crees que la planta no llegará a la primavera, opta trasplantarla en febrero, es decir, cuando pierda las flores.
Cómo trasplantar una flor de Pascua paso a paso
Para trasplantar la flor de Pascua correctamente, en unCOMO te recomendamos que sigas estos pasos:
- Para empezar, esteriliza el cuchillo o la espátula que vas a utilizar para hacer la separación del cepellón de la maceta siempre que esté demasiado atascado. Evita cortar las raíces, con la esterilización del objeto evitarás que la planta pueda enfermarse.
- La maceta nueva debe ser más grande que la anterior, pero con una diferencia escasa de tamaño: apenas 3-4 cm más de diámetro. De esta forma, las raíces de la flor de Pascua tendrán tierra y espacio suficiente para crecer y alimentarse. Es fundamental que cuente con varios agujeros para un buen drenaje, un aspecto esencial para la buena salud de la planta.
- Elabora el sustrato de la flor de Navidad mezclando una parte de humus de lombriz con otra de fibra de coco y de turba. Con esta base se creará una mezcla de sustrato rica en nutrientes y microorganismos saludables, resultando muy ligera y con un drenaje excelente.
- Prepara un lecho de grava en la base de la maceta nueva para mejorar el drenaje y evitar encharcamientos. Después, separa el cepellón de la maceta con especial cuidado y retira los trozos grandes de tierra que no queden sujetos por las raíces, sin llegar a dañarlas en ningún momento.
- Pon el cepellón en la parte central de la maceta y rellena todo el espacio con una mezcla elaborada de sustrato. Agrega a esta mezcla la perlita y la vermiculita para mejorar las propiedades de la planta.
- Finalmente, coloca la nueva maceta en una zona apartada de calefacciones o corrientes de aire. Tampoco coloques ningún plato debajo salvo cuando la riegues. Si debes hacerlo por necesidad, procura vaciarlo 15 minutos después de regarla para asegurarte de que la flor de Pascua no mantiene el exceso de humedad.
Pese a que todas estas indicaciones son para el trasplante a una maceta nueva, puedes trasplantar la flor de Pascua rosa o roja en el suelo del jardín siempre que no hayan fuertes heladas en tu localidad.
Cómo cuidar una flor de Pascua trasplantada
Una vez has trasplantado la flor correctamente, extrema sus cuidados para mantener la flor de Pascua sana:
- Luz: requiere alta luminosidad. Después del verano, necesita de 12 horas de oscuridad para florecer.
- Ubicación: colócala lejos de corrientes de aire o fuentes de calor artificiales.
- Temperatura: No tolera excesivamente bien los cambios de temperatura. Debe estar aproximadamente entre 16oC y 22oC.
- Riego: el sustrato se seca cada 4 días, por lo que debes regarla con esta frecuencia. Riega la flor de Pascua por inmersión utilizando durante 20 minutos un plato con agua.
- Abono: solo debes abonar la planta al comienzo de la primavera y en otoño. Señalamos que puedes hacer abono casero para la flor de Pascua. ¡Crecerá totalmente sana!
- Poda: es especialmente necesaria después de la floración.
Como todas las plantas, la flor de Pascua también necesita sus cuidados para crecer correctamente, es por eso que en unCOMO hemos preparado una guía para que aprendas cómo podar la flor de Pascua. Además, si también quieres saber cómo regar la flor de Pascua, con qué frecuencia hacerlo y todos los trucos para mantener la planta en condiciones, no te pierdas este artículo y sigue leyendo.