La hierbabuena es una planta herbácea y perenne muy conocida, que puede crecer varios centímetros, hasta unos 30 cm, y que tan solo necesita ciertos cuidados básicos y sencillos para salir adelante. Plantar hierbabuena o yerbabuena en casa, sea en el jardín o en una maceta, permite tenerla a mano siempre que la necesites, ya sea para usarla en la elaboración de recetas de cocina, tomarla como infusión o hacer cualquier otro uso de las múltiples propiedades de la hierbabuena.
Si ya has sembrado esta planta aromática en tu hogar o piensas hacerlo en breve, te recomendamos que consultes este artículo de unCOMO sobre cómo cuidar la hierbabuena para mantenerla siempre en óptimas condiciones.
Cuándo sembrar o plantar la hierbabuena
Conviene sembrar la hierbabuena a lo largo de las primeras semanas de primavera. Aunque se puede obtener una planta a partir de las semillas germinadas, lo más común y efectivo para tener la hierbabuena en maceta o en un jardín es crear una nueva planta a partir de esquejes de hierbabuena.
Lo mejor es cortar algún tallo sano y joven y colocarlo en un vaso con agua, sin que las hojas lleguen a mojarse, durante unos pocos días, hasta que veamos que aparecen las primeras raíces. Entonces, es el momento de plantar el esqueje en una maceta o jardín, en la misma época que hemos mencionado: principios de primavera.
Recuerda, además, que como sucede con cualquier planta es necesario trasplantarla de vez en cuando, siempre que observemos que el espacio de la maceta actual se está quedando justo. Así, la planta crecerá más y mejor, lo que nos dará mejores hojas para usar en la cocina o como remedios caseros.
Dónde poner la planta de hierbabuena en casa
Antes de entrar en los detalles sobre cómo se cultiva la hierbabuena, tienes que pensar que entre sus cuidados principales está la ubicación, pues es fundamental que elijas correctamente el lugar donde ubicarás la planta para que crezca fuerte y sana.
Para comenzar, ¿dónde colocar la hierbabuena, al sol o a la sombra? Lo cierto es que esta planta aromática necesita recibir abundante luz solar, por lo que deberás buscar un lugar soleado o con semisombra de tu jardín o ubicarla en una estancia con luz natural si la tienes dentro de casa.
Lo único que tendrás que tener en cuenta sobre los cuidados de la hierbabuena en el exterior es vigilar que no haga mucho frío ni esté en una zona muy poca luz, ya que no lo aguantará. Asimismo, si vives en un lugar con mucho sol, procura mejor ponerla en semisombra para evitar que se quemen sus hojas y tallos.
Temperatura para cuidar la hierbabuena
La hierbabuena es una planta perenne, por lo que tendrá hojas durante todo el año, menos si hay heladas, las cuales no soportará.
De hecho, esta hierba medicinal tan usada en la cocina es capaz de adaptarse a una gran variedad de climas, pero las temperaturas idóneas para su crecimiento se sitúan entre los 15ºC y los 30ºC. Por ello, en invierno, o si suele hacer mucho frío donde vives, será importante proteger las plantas de hierbabuena para evitar que se deterioren a causa de las heladas.
Cómo regar la hierbabuena
Asimismo, la hierbabuena o Mentha Spicata requiere un riego abundante de modo que deberás estar atento/a para que no le falte la humedad. Sin embargo, nunca deberás encharcar la planta, porque se pudrirían las raíces y la planta terminaría muriendo ahogada. De este modo, puedes optar por regarla a diario, especialmente en verano, pero añadiendo pequeñas cantidades de agua.
Es muy importante que para evitar que se encharque la tierra que uses para la hierbabuena en maceta sea un poco suelta o ligera y no se apelmace, es decir, que sea un suelo que drene bien.
Abono para la hierbabuena
En primavera, podrás añadir fertilizante o abono orgánico al sustrato de la hierbabuena para conseguir que brote más sana y no se vea afectada por ninguna plaga.
Sin embargo, cabe destacar que entre las enfermedades de la hierbabuena encontramos a los insectos que la atacan más a menudo: el pulgón y la mosca blanca, pero que también pueden sufrir otras afecciones comunes como hongos. Por ello, es muy importante no solo abonar de vez en cuando, sino procurar un correcto riego y una luz y temperaturas adecuadas.
Cómo podar la hierbabuena
A la hora de recolectar las hojas de hierbabuena para aprovecharlas en cualquiera de sus múltiples usos, podremos cortar sus hojas y tallos durante todo el año para utilizarlos ya sea frescos o dejándolos secar.
Pero, ¿cómo cortar la hierbabuena para que siga creciendo? Respecto a la poda para retirar las partes secas o viejas y permitir que así la planta mejore y se vea más densa y fuerte, lo más recomendable es que después de florecer cada año se realice la poda de la hierbabuena. Esta conviene que sea apurada, es decir, casi a ras dejando entre 5 y 10 cm, según el tamaño previo de la planta. A la siguiente floración, en la próxima primavera, los tallos habrán crecido bastante y saldrán muchas más hojas, haciendo que la hierbabuena sea más frondosa.
Así mismo, si mientras crece la hierbabuena, antes de la floración, observas que hay brotes y hojas que se han secado, conviene que los arranques todos manualmente o con una tijera o podadora pequeña, pues de este modo conseguirás que las ramas jóvenes crezcan con más fuerza.
En caso de que la planta esté enferma, conviene podar las partes muy afectadas sea cual sea el momento, sin esperar a que pase la floración si es necesario.