El recubrimiento en polvo es una alternativa a la pintura en la que las partículas pigmentadas en polvo reciben una carga electrostática y se rocían sobre un artículo conectado a tierra con una pistola especial; Luego, el polvo se cura con calor. Los dos tipos principales de polvo utilizados en el recubrimiento en polvo son los polvos termoplásticos y los polvos termoendurecibles. Los polvos termoplásticos se pueden derretir cuando se recalientan, mientras que los polvos termoendurecibles no se pueden volver a derretir una vez que se curan. En la pintura húmeda tradicional, el revestimiento se "cura" a medida que se evapora la parte líquida de la pintura. Dado que no hay líquido involucrado en un recubrimiento en polvo, se considera pintura seca. Por estas razones, el recubrimiento en polvo también se conoce como pintura en polvo electrostática y pintura sin solvente.
El proceso de curado del recubrimiento en polvo normalmente se realiza en un horno especial; el recubrimiento debe exponerse a un rango de temperatura de 350 a 400 grados Fahrenheit (160 a 210 grados Celsius) durante 20 minutos. Al derretir el polvo termoendurecible más común, se une químicamente para formar una capa de pintura dura y permanente. Los polvos termoplásticos se endurecen, pero si se vuelven a calentar, se vuelven maleables y solo vuelven a endurecerse cuando se enfrían.
Para curar el recubrimiento en polvo, tanto el polvo como el sustrato deben alcanzar la temperatura deseada y permanecer allí durante el tiempo asignado sin fluctuaciones de temperatura. Por esta razón, la mejor manera de curar el recubrimiento en polvo es con un horno de curado. Sin embargo, un horno de cocina funciona igual de bien, siempre que no planee usarlo para cocinar alimentos nunca más. Para artículos pequeños, un horno tostador es igual de bueno. Si bien algunas personas pueden optar por usar una pistola de aire caliente para derretir el polvo para que permanezca en su lugar mientras el artículo se transfiere a un horno, una pistola de aire caliente no puede producir la temperatura estable necesaria para curar el recubrimiento en polvo.
Publicado originalmente:27 de abril de 2011