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Cómo limpiar un piso de cemento

El suelo de espacios como un garaje, patio, jardín, bodega, etc. suelen ser de materiales como cemento u hormigón y, en muchas ocasiones, surgen dudas acerca de su correcto mantenimiento y limpieza. Lo cierto es que puede resultar un poco diferente a limpiar una superficie embaldosada o de algún otro material como podría ser el gres o el granito, y es por ello que en unComo queremos explicarte con detalle cómo limpiar un piso de cemento.

Pasos a seguir: 1

Limpiar suelos de cemento no resulta complicado, tan solo se requieren los utensilios y productos adecuados para mantenerlo limpio y conservar este material en óptimas condiciones. Por ello, lo primero que deberás hacer será barrer el piso con un cepillo o escoba que sea suficientemente firme y dura; te sugerimos que dispongas de una exclusivamente para el cemento, ya que las púas se deterioran con facilidad.

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En caso de que se trate de un piso en el que se acumulen grandes cantidades de polvo, arena, tierra... como puede ser el suelo exterior de una entrada de garaje o jardín, te recomendamos que salpiques un poco de agua antes de barrer. De este modo, evitarás levantar el polvo y será más fácil de limpiar, pero no te excedas o tan solo conseguirás crear un barrizal.

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Si se trata de un piso de cemento con restos de suciedad acumulada como pueden ser hojas y demás elementos naturales, puedes optar por utilizar una manguera de agua a presión o incluso con máquinas limpiadoras de alta presión (tipo Kärcher). Deberás asegurarte de que exista un desagüe o la inclinación pertinente para que el agua no quede encharcada, especialmente si se trata de un piso interior o al que no le dé el sol.

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En cuanto a los productos para limpiar pisos de cemento, te recomendamos que optes por detergentes con pH neutro para así evitar el deterioro de este material que pueden causar ciertas sustancias químicas agresivas.

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A la hora de eliminar manchas de un suelo de hormigón o cemento, puedes probar a aplicar directamente sobre ellas un quitamanchas o producto antigrasa, como el que utilizas en la limpieza de la cocina. Déjalo actuar durante unos minutos y frota después moderadamente con un cepillo suave.