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Cómo reparar grietas en el mármol

Mesas, encimeras, escaleras, suelos… El mármol es un material muy común, bonito y utilizado en muchos elementos de nuestro hogar. Con el paso del tiempo, los golpes y el uso muy frecuente de estas piezas pueden dañar el material. Si te has encontrado con alguna ralladura u orificio en tu mármol, anota las siguientes indicaciones. En unComo te enseñamos cómo reparar las grietas en el mármol. Tan solo debes seguir estos sencillos pasos y ayudarte de un adhesivo de epoxi y podrás reparar tú mismo las grietas de tu mármol.

Pasos a seguir: 1

En primer lugar, limpia toda la superficie del mármol mediante un paño empapado en acetona. Sobre todo procura que la zona en la cual se ubique la grieta quede especialmente limpia.

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En caso de que el mármol agrietado sea de color, puedes mezclar el pegamento de epoxi con colorante o polvo de mármol. Asegúrate de que la mezcla queda de un color parecido al de tu pieza. Recuerda: siempre puedes añadir más tinte o colorante si observas que el color no es del todo igual.

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Una vez tengas la mezcla perfecta, rellena el área de la grieta con ella. Puedes ayudarte de un pincel pequeño, una espátula o una herramienta similar para que el orificio quede perfectamente cubierto. Después deja secar el adhesivo, sabrás que está seco cuando observes que ha quedado como un gel.

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Una vez seco, retira la parte sobrante raspándola con una hoja de afeitar. De este modo, conseguirás que la superficie quede totalmente uniforme. Pero ante todo, ten mucho cuidado de no rayar tú mismo el mármol con la hoja de afeitar, hazlo siempre poco a poco.

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Una vez hayas dejado la superficie lisa, deja reposar el pegamento unas 24 horas aproximadamente. Con esto conseguirás que el adhesivo epoxi se endurezca.

6

Pasado el tiempo requerido, es hora de lijar la grieta. Hazlo mediante un papel de lija fino, de grano 120. Ten cuidado con no rayar el mármol. Para comprobar que el área agrietada ha quedado bien lisa, pasa los dedos y verifica que no ha quedado ningún bulto ni relieve.

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Después de la primera pasada, vuelve a lijar la superficie. Esta vez con un papel de lija un tanto más grueso, de grano 320. Con ello dejarás todavía más fina y lisa el área agrietada.

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Por último, pule la grieta con una lija de grano 1000. Con este paso conseguirás que tanto la textura como el brillo de la superficie del mármol sea uniforme en toda la pieza.

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Después de todo el proceso, puedes volver a pasar un paño húmedo por la pieza de mármol. Verás que quedará reluciente y totalmente reparada. ¡Di adiós a las grietas!