La albahaca es la planta perfecta para agregar a su jardín de hierbas o vegetales de interior, ya que es fácil de cultivar, almacenar y cosechar. Pero, como todas las plantas, la albahaca requiere el cuidado adecuado para seguir prosperando. Afortunadamente, la planta te avisará si algo anda mal, ya sea un problema con el riego, las plagas o los nutrientes.
Al igual que con muchas plantas, las hojas amarillas suelen ser una señal de que algo salió mal. Y si ha notado algunas hojas amarillas en su planta de albahaca, es hora de actuar. En esta guía, aprenderá todas las posibles razones por las que sus hojas de albahaca se vuelven amarillas para que pueda detener el problema antes de que se apodere de la planta.
Regar en exceso
El riego excesivo, que da como resultado un exceso de humedad y potencialmente la pudrición de la raíz, es una de las principales razones de las hojas amarillas. Las plantas de albahaca requieren un suelo con buen drenaje, aunque también les gusta permanecer ligeramente húmedas. Esto puede ser un desafío para muchos jardineros, por lo que hay algunas reglas generales a seguir.
Primero, riegue la planta cada siete a 10 días, verificando qué tan húmeda está la tierra con los dedos antes de regar. Si planta albahaca en macetas, opte por recipientes con orificios de drenaje para evitar el riego excesivo. Recuerda que las plantas en macetas tienden a secarse más rápido que las que están plantadas en el suelo, así que vigila las plantas en macetas cuando se trata de regar.
Poca iluminación
Las plantas de albahaca prefieren al menos seis horas de luz solar directa al día, por lo que la falta de luz puede provocar hojas amarillas. Considere incluir una luz de crecimiento o dos en su jardín de contenedores si está cultivando en interiores o en un balcón mal iluminado. De lo contrario, coloca tus macetas en las ventanas más soleadas de tu hogar. Una iluminación adecuada también promoverá un crecimiento saludable, aprovechando al máximo sus plantas.
Enfermedad
Las enfermedades de las plantas como el mildiú velloso, el marchitamiento por fusarium y la mancha bacteriana de la hoja se conocen a través de las hojas amarillas y descoloridas. Desafortunadamente, no existe una cura para estas enfermedades, por lo que el mejor curso de acción es cosechar las hojas asintomáticas y desechar el resto de la planta.
Nota :aunque se están probando fungicidas y variedades resistentes a enfermedades, no se recomiendan ni están fácilmente disponibles para los jardineros domésticos.
Limpiar las tijeras de podar, regar la base de las plantas y aplicar mantillo pueden retrasar la propagación de enfermedades.
Hacinamiento
Como todas las plantas, las plantas de albahaca necesitan espacio para crecer; si su contenedor se llena demasiado, su planta no tendrá acceso a los nutrientes que necesita para prosperar. Debe podar las plantas de albahaca durante toda la temporada para mantener el crecimiento y eliminar las flores. También puede evitar el hacinamiento trasplantando plántulas a una distancia de 3 a 4 pulgadas o plantando una sola plántula en una maceta de 4 pulgadas.
Plagas
Las plagas pueden ser otra razón por la que las hojas de la planta de albahaca se están poniendo amarillas. Los áfidos, las orugas y los ácaros tienden a llegar a las plantas de albahaca, causando hojas amarillas e incluso problemas como agujeros. Es importante atrapar las plagas rápidamente, ya que pueden ser muy perjudiciales para la salud general de sus plantas.
Inspeccione regularmente su albahaca (y otras plantas) en busca de plagas e insectos. Y si detecta algunos bichos molestos, hay varias maneras de deshacerse de ellos. Sin embargo, recuerda que los insectos beneficiosos, como las abejas y los parásitos pulgones, ¡no son algo de lo que debas preocuparte!
Falta de nutrientes
Las plantas de albahaca se desarrollan mejor en un suelo con un pH de 6 a 7,5 y requieren una cantidad moderada de fertilizante. Aún así, las plantas necesitan nutrientes para crecer, y la falta de los mismos puede provocar que las hojas se vuelvan amarillas. Verifique el pH del suelo antes de fertilizar, ya que demasiado nitrógeno también puede hacer que las hojas de albahaca se vuelvan amarillas.
Además, cuando use un fertilizante líquido en plantas de maceta, use la mitad de la concentración recomendada en la etiqueta, fertilizando las plantas de interior cada tres o cuatro semanas y las de exterior cada cuatro a seis semanas. Sus plantas de albahaca también pueden necesitar un trasplante, ya que las plantas unidas a las raíces no pueden absorber los nutrientes.
Problemas de temperatura
Las plantas de albahaca prosperan en áreas donde las temperaturas diurnas son de aproximadamente 70 grados Fahrenheit y no bajan de los 50 por la noche. Si ha notado que comienza a hacer un poco más de frío afuera o tiene el aire acondicionado demasiado alto en el interior, es posible que el frío esté afectando sus plantas de albahaca. Considere mantenerlos en un área con más luz solar para calentarse o en un invernadero.
¡No dejes de hojear!
La mayoría de las veces, las hojas amarillentas son una señal de que algo no está bien. Afortunadamente, el cuidado adecuado es la mejor manera de garantizar que sus plantas de albahaca se mantengan felices y saludables.
Por lo tanto, preste atención a las técnicas de riego, la iluminación, las plagas dañinas, y pode y fertilice adecuadamente las plantas. Ahora que sabe qué podría estar afectando a sus plantas de albahaca, es hora de actuar y hacer los cambios necesarios.
¿Alguna vez has tenido este problema con tus plantas de albahaca? Si es así, ¿qué consejos y trucos podrían ayudar a otros jardineros? ¡Comparte en los comentarios a continuación!