Para aquellos que buscan paz y tranquilidad, aprender a hacer un jardín zen es una gran opción. Ya sea un paisajista experimentado o un principiante, la jardinería es una forma maravillosa de mejorar el valor de su propiedad y, al mismo tiempo, crear un espacio relajante. Para convertir su patio trasero en un oasis privado, considere un jardín zen.
Jardín Zen Origen
La paz y la tranquilidad son lo que muchos de nosotros buscamos, pero es posible que no esté claro cómo exactamente un jardín nos ayuda a lograr esos elevados objetivos. Para entender mejor, primero debes saber qué significa un jardín zen. Originalmente, los jardines zen fueron diseñados por monjes japoneses como un lugar para rezar. El jardín zen más antiguo que se conoce está en el Templo Ryoanji en Kioto y fue construido en 1499. El tipo más común de jardín zen se llama "karesansui", que se traduce como montaña y jardín acuático. Un jardín zen está destinado a proporcionar al visitante fuerza interior a medida que regresa a los elementos básicos haciendo que las rocas representen montañas y la arena represente agua.
Cómo hacer un jardín zen
Las variedades de jardines zen de escritorio o en miniatura se pueden comprar en muchas tiendas de manualidades o pasatiempos, como Michael's o Hobby Lobby, pero los jardines traseros de tamaño real brindan al visitante una experiencia más completa.
Materiales y Suministros
- Rastrillo
- Cuatro piezas de madera de 2x4x8
- Tornillos para madera
- Taladro o destornillador
- Arena para juegos
- Río u otras rocas atractivas
Instrucciones de montaje
Despeje un área de su patio trasero de aproximadamente nueve por nueve pies. Asegúrese de que se elimine el césped o los escombros y que la parcela sea relativamente plana. Use una pala para quitar el césped o para reorganizar el suelo para aplanar la superficie.
Construya un marco de madera atornillando las cuatro piezas de madera en un cuadrado con tornillos para madera. Alterna cada extremo para que la forma final sea un cuadrado. El marco medirá ocho por ocho pies. Coloque el marco en el centro del área previamente despejada y presione el marco firmemente en el suelo para que quede una pulgada en el suelo. Esto evitará que el marco se mueva y que la arena se derrame una vez que esté lleno.
Agregue lentamente arena para juegos de grano fino hasta que se llene el marco. No desborde el marco ya que aún se deben agregar otros elementos del jardín. La arena para parques infantiles es una opción económica, pero otras opciones incluyen lava molida o ladrillos y están disponibles en una variedad de colores. Visite su tienda local de paisajismo para ver alternativas si lo desea.
Rastrillar la arena para que quede nivelada. Agregue rocas en dos o tres áreas. Para un efecto más dramático, agrupe rocas de varias alturas o formas. Asegúrese de que las rocas estén seguras y no estén colocadas una encima de la otra donde puedan caer y crear un peligro para la seguridad. Muchos jardines zen usan rocas redondas u obeliscos en lugar de agrupaciones. El propósito de las rocas es representar una montaña, pero debes usar la forma que más te atraiga.
Una vez colocadas las rocas, usa el rastrillo para crear líneas en la arena. Dado que el propósito de la arena es representar el agua, los diseños que hagas en la arena deben representar olas u ondulaciones en la superficie del agua. Es posible que desee utilizar más de un tamaño de rastrillo para obtener diferentes diseños en la arena. Practique diferentes niveles de presión, empujando y tirando de los movimientos, o variando los tamaños de rastrillo hasta que tenga un diseño que le guste.
Coloque un banco o asiento de jardín cerca del jardín zen para que pueda revisar su trabajo manual. Como no hay plantas en el jardín, el mantenimiento es mínimo. Simplemente cambie las rocas y rastrille la arena en otro patrón cuando se canse de un diseño en particular.
Sugerencias finales
Una vez que aprenda a hacer un jardín zen, tómese el tiempo para usarlo. Dedique unos minutos cada día a dejar que las preocupaciones y las listas de cosas por hacer desaparezcan. Al calmar su mente y tomarse tiempo para usted mismo, puede que le resulte más fácil concentrarse y lidiar con los problemas.