El tomillo es un pequeño arbusto que crece de forma natural en regiones de climas cálidos y que también resulta muy sencillo de cultivar en una maceta o en cualquier jardín. Las aromáticas hojas que salen de sus finas ramas son muy apreciadas en la gastronomía y sirven para dar sabor a un sinfín de platos de la dieta mediterránea. El tomillo es rico en nutrientes como el calcio y el fósforo y posee propiedades antisépticas y antiinflamatorias, por lo también se utiliza como hierba medicinal con fines terapéuticos.
Puede utilizarse fresco, recién cortado, y también secarse con distintos métodos muy sencillos que permiten tenerlo a mano como condimento perfecto. Aprende en unCOMO cómo secar tomillo, para que aproveches al máximo este regalo de la naturaleza y dispongas de él siempre que lo necesites.
Secar tomillo al aire
Es la manera más natural de secar tomillo, aunque requiere algo de tiempo y exige tener algunas precauciones para evitar que, en lugar de secarse, las ramitas acaben estropeándose o pudriéndose.
Las claves para dejar secar el tomillo a su ser, es decir, interviniendo en el proceso lo menos posible son:
- Corta solo las ramas que no tengan floración y a ras del tronco, igual que harías en una poda. Si las ramas son muy grandes y quieres solo una parte, corta siempre por encima de un nódulo o yema, para favorecer, así, el crecimiento posterior.
- Lava bajo el grifo y a conciencia las ramas, para eliminar cualquier resto de tierra o partículas de suciedad y, seguidamente, sacúdelas con suavidad para que suelten el exceso de agua.
- Une varias ramas en un ramillete de no más de 5 o 6 y átalas con un hilo o cordel para que el secado te resulte más sencillo. No los aprietes demasiado para que el aire pueda circular entre las hojas evitando que puedan ennegrecerse o acabar mohosas.
- Cuélgalos con los tallos hacia arriba en un lugar seco y con buena ventilación, siempre asegurándote de que no les da el sol directo.
- Deja secar entre una y dos semanas. Pasado este tiempo, ya podrás partir las ramas o directamente separar las hojas y conservarlas convenientemente.
Secar tomillo en el horno
El horno es el método intermedio entre el secado natural y el microondas, por lo que es una forma de secar el tomillo muy segura, eficaz y, además, en un tiempo relativamente corto.
- Pon el horno a calentar entorno a los 150º, a una temperatura media no más, ya que se trata de secarlas no de cocinarlas.
- Lava, sacude y coloca las ramas sobre papel vegetal en la bandeja del horno. Hazlo en una sola capa, no unas encima de otras.
- Introduce la bandeja en la zona central cuando el horno alcance la temperatura idónea
- Deja secar entre 45 minutos y una hora. Si notas que las hojas aún están verdes, puedes prolongar un poco más el tiempo de secado.
- Extrae la bandeja, finalmente, deja que el tomillo se enfríe y ya puedes partir las ramitas o separar las hojas.
Secar tomillo en el microondas
Si la receta que estás preparando requiere tomillo seco y solo lo tienes fresco, el microondas puede solucionarte el problema con la rapidez que requiere la situación. El microondas resultará eficaz a la hora de lograr tu objetivo pero, como inconveniente, tendrás que estar muy pendiente de los tiempos exactos, para impedir que las pequeñas hojas del tomillo se quemen en el proceso:
- Coloca el tomillo sobre un papel absorbente y ponlo en un recipiente apropiado para el microondas.
- Haz que el microondas funcione a potencia media - alta durante 15 o 20 segundos.
- Detenlo y comprueba cómo van las hojas. Si siguen verdes, repite la operación.
Puede que tengas que volverlo a hacer una vez más pero, más vale pecar de defecto que de exceso, es decir, aunque tardes un poco más, conviene ir secar el tomillo a base de dos o tres periodos muy cortos en el microondas para asegurarte así de que su potente acción no acabará estropeándolo.
Secar tomillo en el deshidratador de alimentos
Como indica el nombre de este práctico pequeño electrodoméstico, su función es eliminar los líquidos que contenga cualquier alimento sometido a su acción y, por tanto, hará exactamente lo mismo con las hojas de tomillo, secándolas perfectamente y manteniendo todo su aroma y sabor.
- Coloca el tomillo en un recipiente apropiado y pon el deshidratador a temperatura media – baja para hacer el proceso de secado correctamente.
- Deja actuar entre 1 y 2 horas. El tiempo dependerá de la cantidad de ramas que hayas introducido.
Ahora que ya sabes cómo secar tomillo, puede que te resulte interesante saber Cuáles son las propiedades del tomillo o Cómo hacer una mascarilla de tomillo para el cabello.