Limpiar un inserto de chimenea no tiene por qué dejarlo echando humo. Si bien la tarea puede ser complicada la primera vez, una vez que domine algunas técnicas simples, devolver el inserto a su apariencia original no será un problema. La limpieza regular puede ayudarlo a mantener una excelente chimenea.
Acerca de los insertos para chimeneas
Los insertos de chimenea se pusieron al rojo vivo en la década de 1970. Su popularidad fue impulsada por la primera crisis del petróleo de los Estados Unidos. En ese entonces, a los propietarios se les decía que podían ahorrar dinero agregando un inserto para quemar leña en la abertura de la chimenea. Sin embargo, con el tiempo se descubrió que los propietarios de viviendas no estaban instalando y manteniendo adecuadamente los insertos. La instalación defectuosa y la falta de mantenimiento provocaron una serie de incendios domésticos mortales en la década de 1980.
De acuerdo con la Comisión de Seguridad de Productos del Consumidor, la producción excesiva de creosota, que está contenida en los gases de combustión volátiles que suben por la chimenea, es la causa principal de las llamas en las chimeneas. Para proteger su hogar de un incendio peligroso en la chimenea, es fundamental que limpie periódicamente los depósitos de creosota del inserto de la chimenea. Los residuos de creosota contienen combustible que puede encender un fuego sin exposición directa a las llamas.
Consejos paso a paso para limpiar un inserto de chimenea
La limpieza de un inserto de chimenea se vuelve más fácil cuanto más lo haga. Sin embargo, el proceso es un trabajo sucio, por lo que muchos propietarios contratan profesionales para que lo hagan por ellos. La desventaja de subcontratar la tarea es que los deshollinadores no son baratos. Esto es especialmente cierto si cobran por hora y tienes un año de creosota horneada para quitar del inserto.
Es importante limpiar la chimenea al menos una vez durante el invierno o más a menudo si enciende fuego a diario. Si opta por hacer el trabajo usted mismo, asegúrese de asignar al menos un par de horas a la tarea. A continuación, siga estos sencillos pasos para limpiar a fondo el inserto de su chimenea:
- Empiece extendiendo una lona de plástico o varias capas de papel periódico en el área frente a la chimenea para mantener el piso limpio.
- Retire toda la madera, las rejillas y las herramientas de dentro y alrededor de la chimenea.
- Use una pala pequeña para sacar las cenizas o los escombros. Si realiza el mantenimiento de su chimenea con regularidad y no tiene montones grandes de suciedad y polvo, simplemente aspire el área dentro y alrededor de la chimenea con un accesorio de manguera. Su objetivo es eliminar la mayor cantidad posible de arena suelta.
- Use un cepillo de alambre resistente para fregar el interior de la chimenea. Preste especial atención a la eliminación de la creosota horneada de las paredes.
- Use un cepillo de alambre pequeño, un cepillo para biberones o un cepillo de dientes firme para eliminar la suciedad y los residuos de la puerta del inserto y las bisagras.
- Aspira la creosota suelta y la suciedad con la aspiradora.
- Mezcle una cucharadita de jabón líquido para lavar platos, media taza de bicarbonato de sodio y un galón de agua tibia en un balde grande.
- Use la solución y un trapo para limpiar el inserto de la chimenea. Dependiendo de la cantidad de creosota y suciedad que se haya acumulado, es posible que tengas que frotar vigorosamente para aflojar el desorden. Frote todo el inserto, por dentro y por fuera, prestando mucha atención a las rejillas y los conductos de ventilación. Es posible que tengas que repetir el proceso con varios trapos nuevos para eliminar toda la suciedad.
- Tenga otro balde con agua limpia a un lado. Usa el agua para enjuagar el inserto después de haberlo frotado con la solución de jabón y bicarbonato de sodio.
- Seque bien el inserto con un paño limpio.
- Rocíe abundantemente un limpiador de ventanas comercial o vinagre blanco sobre las características de vidrio del inserto de la chimenea. Limpie cualquier suciedad acumulada que pueda haberse acumulado en las puertas. Si los residuos están adheridos, use un cepillo para aplicar el limpiador en el vidrio antes de limpiarlo.
- Reemplace la rejilla, los leños y las herramientas, y deseche la lona de plástico o los periódicos.
Este ritual de limpieza debe realizarse al menos una vez al año, incluso si solo enciende un fuego algunas veces durante la temporada de invierno.
Consejos de limpieza adicionales
Si tiene detalles de latón en el inserto de su chimenea que necesitan limpieza, mezcle partes iguales de sal y jugo de limón en un tazón para crear una pasta fina. Luego, sumerja un cepillo de dientes en la mezcla y frótelo suavemente sobre el latón sucio. Permita que la mezcla repose durante unos minutos antes de limpiarla con un paño húmedo. Luego, pule el latón con un trapo seco para restaurar el brillo.
Finalmente, la seguridad es lo primero cuando se limpian los insertos de la chimenea. Recuerde mantener su espacio de trabajo bien ventilado cuando elimine la suciedad, el polvo y los escombros. Además, si es asmático, es posible que desee usar una máscara mientras limpia, o simplemente subcontratar el trabajo. El deseo de tener un inserto de chimenea brillante nunca debe comprometer su salud y bienestar.