Se dice que nunca estás realmente solo en tu casa. Sí, eso suena como el comienzo de todas las películas de terror que se han hecho, pero es verdad. Y no estamos hablando de bichos como insectos y ratones:hay una serie de patógenos invisibles que flotan en el aire que respiramos y ni siquiera lo sabemos. Se sabe que las plantas de interior purifican el aire de su casa, pero un día, pueden cumplir una doble función como seguridad del hogar.
Según un estudio y experimento reciente de la Universidad de Tennessee, las plantas modificadas genéticamente pueden detectar cuando el ecosistema de una casa está desequilibrado. El radón, el monóxido de carbono, el moho y otras bacterias son algunos de los principales peligros que un hogar y sus residentes pueden enfrentar, y las futuras plantas de interior pueden cambiar de color cuando esos anticuerpos dañinos están presentes. Estamos hablando de una planta verde que se vuelve naranja cuando detecta que hay aire nocivo en tu casa. ¡CIENCIA!
¿Como funciona esto exactamente? Científicos de la Universidad de Tennessee probaron el fenómeno en una planta de tabaco. Inyectaron una proteína naranja fluorescente sintética en la planta y luego liberaron bacterias en el aire. Una vez que la planta "inhalaba" la bacteria, brillaba de color naranja (como una lámpara de lava, pero mucho mejor). Se cree que en el futuro, los científicos podrán (éticamente) tomar genes de medusas fluorescentes y modificar el gen para defenderse o brillar contra sustancias químicas domésticas no deseadas, como el radón y el monóxido de carbono. Luego, el gen se inyectará en plantas para uso doméstico.
Ahora, hay algunas pautas para que esto funcione correctamente. Las plantas que se modificarán genéticamente con el propósito de la seguridad del hogar deben tener un pigmento de color bajo, como una planta araña o un lirio de la paz, para poder mostrar cambios de color. También deben tener un tamaño decente, ya que las plantas grandes y densas hacen cambios de color más evidentes que las más pequeñas. También es mejor que estas plantas estén alojadas cerca de un respiradero, donde la presencia de patógenos dañinos está más concentrada. ¡Una pared viva sería ideal para este propósito!