La humedad es un problema común en las paredes y techos de muchos hogares, que suele generar problemas diversos como la aparición de manchas, descorche de las paredes, se estropea la pintura o papel pintado, etc. Pero para poder solucionar estos desperfectos, primero es necesario que descubramos el origen de la humedad, cosa que no es siempre una tarea fácil. Cada tipo de humedad necesita una tarea concreta para resolver el problema y evitar que vuelva a surgir. Para que puedas distinguirlas, en unComo.com te explicamos cuáles son los tipos de humedad en las paredes.
Humedad por capilaridad
La humedad por capilaridad es aquella que sube desde el suelo y mancha la parte baja de las paredes. Suele darse en sótanos, parkings y plantas bajas y se presenta en forma de manchas continuas en las paredes, aunque también pueden aparecer en suelos.
Humedad de filtración
Como su nombre indica, cuando es por filtración se genera humedad por la entrada de agua del exterior, escape de tuberías o falta de impermeabilización de zonas húmedas como baños y cocinas. En algunas ocasiones, también son producidas a causa de un mal aislamiento de las casas adyacentes.
Humedad de condensación
Se trata de manchas de humedad con verdín en la superficie de las estancias, debido a la condensación del vapor de agua contenido en el ambiente. Las manchas adquieren forma circular, y es un tipo de humedad que suele darse en la cercanía de ventanas y es común de zonas frías, poco soleadas y con un porcentaje de humedad en el ambiente elevado.