El bórax en polvo es un material fácil de encontrar en cualquier droguería y que se usa desde hace cientos de años. Sus usos son muy amplios, puede ser un perfecto quitamanchas para eliminar los olores o las manchas de grasa de nuestra ropa. También se usa como fregasuelos, limpiador de muebles, para quitar el óxido de nuestra joyas (junto con un poco de zumo de limón), como desatascador de cañerías o como ambientador. Pero uno de los usos que más se ha extendido entre la larga lista de utilidades del bórax, es como insecticida. Por eso, en este artículo de unComo.com te enseñamos cómo usar el bórax para las hormigas y, de paso, te damos algunos consejos sobre sus otros muchos usos.
Pasos a seguir: 1Antes de explicar cómo usar este material como insecticida, es importante saber qué es el material con el que vamos a trabajar. El bórax, también conocido como ácido bórico o tetraborato de sodio, es el nombre que comercialmente se le ha asignado a la sal de boro. Se trata originalmente de un cristal blanco y muy suave que se disuelve rápidamente en agua.
Podemos encontrar bórax en muchos productos que usamos a diario. Se utiliza comúnmente en detergentes, jabones, productos desinfectantes, suavizantes para la lavadora, en productos cosméticos como el maquillaje, esmaltes, cerámica. También se usa en la composición de pinturas, de soldaduras, o como elemento fundente a la hora de soldar oro, plata y otros metales con los que hacer joyas. Pero lo que nos interesa en este caso concreto, es su uso como insecticida.
2El bórax es un buen aliado para eliminar varios tipos de plagas, y no solo las molestas hormigas que podamos tener por casa. Así, el ácido bórico ayuda a eliminar las plagas de cucarachas, puedes añadir líneas de bórax en los rodapiés, revestimientos, puertas, ventanas o molduras para evitar que estos desagradables insectos entren en casa; pulgas, para proteger a nuestras mascotas de las pulgas se aplica bórax en la superficie de los lugares donde suele permanecer el animal, dejando que el material actúe durante un día y aspirando al siguiente; roedores, pues ratas y ratones pueden ser atraídos con trampas de comida envenenadas con bórax —esto también sirve para las moscas— y, por supuesto, hormigas.
Hay distintas formas de eliminar las hormigas utilizando bórax. La primera de ellas es colocando bórax en polvo bajo las puertas de la cocina, las despensas u otras estancias de tu casa donde suelen haber hormigas. Coloca el mineral en paredes y suelos, grietas y agujeros de la casa para que resulte más eficaz.
3El bórax en polvo nos servirá para eliminar casi cualquier tipo de hormiga. Estos insectos se dividen en dos grandes categorías: las hormigas que se alimentan de las grasas y las que comen azúcar. Si la plaga que nos molesta es de las segundas, existe otra forma de usar el bórax para eliminarlas que resultará más efectiva.
La manera más fácil de terminar con las hormigas de azúcar, que suelen encontrarse en los armarios de la cocina y en las alacenas, es juntando el bórax con azúcar glaseado (azúcar en polvo) a modo de cebo, otro material barato y fácil de encontrar en cualquier establecimiento de venta de alimentos. Como el bórax, además, el azúcar en polvo o glaseado, compuesto también por harina de trigo y almidón de maíz, se disuelve rápidamente en agua.
En primer lugar, deberemos tener en cuenta la cantidad de bórax que vamos a utilizar en nuestro cebo (azúcar glaseado), ya que lo ideal es conseguir una mezcla con baja concentración de veneno, de modo que las hormigas puedan ingerir el azúcar sin morir en el acto para tener tiempo de llegar a su hormiguero y contagiar a toda la plaga. Empieza utilizando pocas cantidades de bórax (media cucharadita en una taza de azúcar en polvo) y a las dos semanas agrega dos cucharaditas de ácido bórico a la mezcla.
Cuando tengamos la taza de bórax y azúcar glaseado, añadimos 9 cucharaditas del producto final a un cuarto de taza con agua caliente y removemos bien hasta conseguir un líquido homogéneo. El resto de bórax y azúcar guárdalo para futuras aplicaciones en un lugar seco y con poca lugar.
En lugar de azúcar glaseado, puedes usar otros cebos dulces como miel, jarabe de maíz o jalea de manzana.
4Una vez tenemos ya nuestro veneno preparado, es el momento de aplicarlo. Las hormigas de azúcar suelen encontrarse, como hemos señalado anteriormente, en los armarios de la cocina o en las alacenas. Así que esos serán los lugares donde depositaremos el veneno.
Es muy sencillo. Conseguimos tarros de comida de bebés de los que venden en las tiendas de alimentos. Con un cuchillo u otra herramienta punzante, hacemos pequeños agujeros en la tapa, asegurándonos que son lo suficientemente grandes como para que quepan las hormigas.
A continuación, añadimos dos bolas de algodón empapadas de veneno dentro de cada tarro. Es recomendable no dejar estos tarros cerca de los niños y marcarlos como veneno para evitar intoxicaciones humanas.
Puedes utilizar los tarros en otras zonas de la casa, incluso en el jardín, donde hayas visto también hormigas, pero asegúrate de que todos los habitantes de la casa saben qué contiene el objeto. Por último, cambia el algodón una vez o dos a la semana.
5En el artículo cómo matar hormigas con ácido bórico, también te enseñamos otra forma de usar el bórax contra estos diminutos insectos. Es muy fácil, solo tienes que mezclar el ácido bórico con leche condensada y mezclarlo hasta tener una pasta con la que podemos hacer pequeñas bolitas que dispondremos por todos los rincones de la casa, siempre alejadas de niños y de nuestras mascotas. Las hormigas tan dulzonas no tardarán en comerse estos pequeños ‘caramelos’.