Los electrodomésticos hacen el día a día mucho más fácil al liberarnos de muchas tareas domésticas. Y uno de los mejores inventos que ha habido es el lavavajillas para no tener que fregar platos, sartenes, ollas o vasos, entre otros utensilios de cocina.
Sin embargo, ponerlo, sobre todo, cuando no se ha hecho nunca o bien se cambia el lavavajillas porque se ha estropeado, tiene sus trucos y es conveniente seguir un proceso para que la maquinaria funcione sin problemas y no haya averías nada más comprarlo. Desde unCOMO te explicamos cómo usar el lavavajillas por primera vez.
Antes del primer uso del lavavajillas, lee el manual
Tanto si has cambiado de lavavajillas como si es el primero que compras y tienes que hacerlo funcionar es importante seguir una serie de pasos previos. Son más sencillos de lo que inicialmente parecen, pero es importante hacerlos.
Lo primero en lo que tienes que fijarte es que el lavavajillas esté bien conectado tanto a la toma de luz eléctrica como a la de agua. Normalmente, cuando se compra, los instaladores lo dejan todo listo y dan las primeras indicaciones, pero cada vez hay más empresas que apuestan por su venta sin llevarlo a casa y sin instalación, teniendo que hacer uno mismo ese proceso.
Con independencia de que el instalador te haya o no explicado su funcionamiento, lo siguiente que debes hacer es leer las instrucciones. Aunque el manual puede parecer extenso, no lo es tanto porque viene en múltiples idiomas. Es fundamental que lo leas con atención y sigas todas las recomendaciones que se indican para su puesta en marcha por primera vez.
Ajustes claves antes del primer lavado del lavavajillas
Antes de colocar los utensilios de cocina en el lavavajillas y de ponerlo en marcha, es importante hacer una serie de ajustes:
- Programar bien la hora: y es que muchos de estos aparatos suelen mostrar en el temporizador una determinada hora por defecto. De esta manera, habrá que ir al panel de programación para poner el horario correcto.
- Idioma: los modelos más avanzados suelen incorporar pantallas para dar indicaciones sobre el tiempo de lavado o diferentes programas, entre otras indicaciones. Esta información no siempre está en español. De este modo, debes cambiar el idioma.
- Cal y dureza del agua: el descalcificador también debes ajustarlo porque el lavavajillas precisa de agua sin cal. Pero, además, deberás tener en cuenta la dureza del agua de tu localidad para hacer el ajuste necesario y dejar puestos los valores correctos. Esto normalmente aparece explicado en una tabla dentro del manual. Aparte, no te olvides de añadir sal específica para este electrodoméstico en su lugar correspondiente.
- Productos: además de sal para lavavajillas, igualmente tienes que poner abrillantador en el apartado que hay para verter este producto. No te olvides también de ajustar su nivel de dosificación porque influye en el secado de los utensilios y en el brillo que queda en ellos tras el lavado. Y, por supuesto, ponle detergente en la cubeta específica.
Cómo poner un lavavajillas por primera vez
Una vez realizados todos los ajustes anteriores, ahora toca poner el lavavajillas. Muchas personas piensan que este electrodoméstico puede utilizarse tal cual la primera vez. Sin embargo, no es así. El primer lavado siempre es conveniente que se haga estando su interior vacío y con una alta temperatura. De esta manera, eliminarás gérmenes, bacterias o cualquier resto de productos o manchas que hayan podido quedar durante su proceso de fabricación.
Cuando ya hayas realizado ese primer lavado, es el momento de poner el lavavajillas de verdad. Normalmente, en las instrucciones suele indicarse la colocación más adecuada en la bandejas superior e inferior en función de cómo hayan sido diseñadas.
Siempre es importante que no coloques los utensilios a lo loco ni llenes hasta los topes el interior del lavavajillas porque no se lavará bien. Un consejo fácil es distribuir los cubiertos en el cubo que viene incluido, mientras que las cazuelas y platos tienes que colocarlos en la bandeja de abajo. Vasos y otros utensilios de cocina de reducido tamaño es mejor que vayan en la bandeja de arriba. También puede que te interese este otro artículo sobre Qué no debo meter en el lavavajillas.
Una vez hayas colocado la vajilla y los utensilios, antes de darle al botón de comenzar, no te olvides de comprobar que ningún utensilio tapona la entrada de agua y el aspersor. Si no lo haces y algo bloquea, no se hará bien el lavado e, incluso, se puede llegar a estropear el lavavajillas.
Estos son todos los pasos previos a dar. Desde unCOMO esperamos haberte ayudado a que aprendas cómo usar el lavavajillas por primera vez. De todos modos, ante cualquier duda siempre puedes acudir a la tienda en la que lo has comprado para que te ayuden o te aclaren todo lo que no hayas comprendido bien tras leer el manual de instrucciones.