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Cómo colocar la cama según el Feng Shui

La decoración Feng Shui se centra en la premisa de que la ubicación de los objetos es determinante en el flujo de energía positiva dentro de una determinada estancia. Y en uno de los espacios en los que esto cobra especial importancia es en el dormitorio, fundamental para gozar de una perfecto descanso y estado de relajación. Además de muchos otros factores imprescindibles en una habitación, la posición de la cama es según este arte oriental la clave para armonizar y equilibrar adecuadamente el espacio. No te pierdas este artículo de unComo y descubre cómo colocar la cama según el Feng Shui.

Pasos a seguir: 1

La posición de la cama dentro del dormitorio es, según el Feng Shui fundamental para favorecer el descanso y despertar con vitalidad, sin sentirnos agotados o nerviosos. La primera regla es que la cama no puede estar ubicada justo frente a la puerta o bajo la ventana, lo ideal es que su cabecera tenga detrás la pared del dormitorio que está más alejada de la puerta.

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La ausencia de un cabecero de cama es según el Feng Shui sinónimo de inestabilidad y falta de seguridad ante la vida. Por ello, son preferibles las camas con cabeceros sólidos y que estén colocadas en una pared en la que no haya ventanas o espejos. En el caso de que no se pueda evitar y haya una ventana sobre la cama, procura ocultarlas con unas buenas cortinas.

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En la tarea de colocar la cama según el Feng Shui también debes tener en cuenta que es mejor evitar la ubicación de objetos colgantes sobre el cabecero de la cama. Si quieres decorar esa pared de todas formas, te aconsejamos que elijas objetos no muy pesados como por ejemplo alguna pequeña lámpara de pared. Descarta además la instalación de ventiladores de techo sobre la cama.

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Otro de los criterios fundamentales del Feng Shui en cuanto a la colocación de la cama en el dormitorio, es que es imprescindible que se pueda acceder a ella por ambos lados. Por tanto, evita ubicarla pegada completamente a una de las paredes. Y, si es posible, adquiere dos mesitas de noche y sitúalas a cada uno de los lados de la cama.

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Además de la colocación y orientación de la cama, el arte del Feng Shui presta mucha atención a la influencia de los colores en nuestro bienestar. Lo ideal es optar por ropa de cama (sábanas, fundas de almohada, mantas, colchas, etc.) en colores suaves y pasteles, ya que estos evocan tranquilidad y favorecen el buen descanso. Además se prefieren los tejidos naturales a los que son sintéticos.