El lavavajillas es uno de los electrodomésticos más útiles y demandados en cualquier hogar. Así, limpiar la vajilla se ha convertido en todo un placer, ya que gracias a este electrodoméstico la tarea se ha simplificado y tú puedes dedicar el tiempo a otros quehaceres. No obstante, todavía hay mucha gente que no sabe cómo utilizarlo de manera adecuada. Recuerda: no todo está permitido.
En unComo.com te explicamos qué no debes meter en un lavavajillas. Lee con atención el siguiente artículo y asegúrate de que no estropeas ni el lavaplatos ni los objetos que has introducido en él.
Pasos a seguir: 1A la hora de utilizar los electrodomésticos, no todo está permitido. Probablemente, muchos de los objetos que sueles meter en el lavavajillas acabarán estropeándose o estropeando el electrodoméstico.
Sigue leyendo para saber qué no debes meter en un lavavajillas y poder, así, dar más vida a tus utensilios y a tu electrodoméstico.
2Los cubiertos o utensilios que tengan un mango de madera no se recomiendan meter en el lavavajillas. Piensa que la madera absorberá la humedad y, a largo plazo, estropeará el objeto. Del mismo modo, procura no lavar en el lavavajillas las tablas de picar, platos de madera o cualquier objeto de este material.
3Los objetos de metal también pueden sufrir daños, sobre todo si no son de metal inoxidable. Si tienes sartenes, ollas, cuchillos multifunción, cuchillos artesanos u otros utensilios de metal, acero quirúrgico, aluminio o similares, no los metas dentro del lavavajillas, pues podrían estropearse.
4El calor también puede afectar a múltiples materiales. Así que todos los utensilios que sean vulnerables al calor, es recomendable no meterlos en el lavavajillas. Algunos ejemplos son los plásticos o los cepillos de cerdas de plástico.
5En caso de que coloques objetos de plástico con piezas móviles que puedan perderse, lo más recomendable es colocar las pequeñas piezas en bolsas aparte. De este modo, evitarás perderlas y que dañen tu lavavajillas.
6Observa las etiquetas de los objetos que compras antes de meterlos al lavavajillas. Algunos de ellos será mejor lavarlos a mano, como en el caso del cristal. Las copas o vasos quedarán más limpias y relucientes y además evitarás que el cristal se dañe o se rompa con el roce y el movimiento del lavavajillas.