El verano es una de las estaciones más esperadas por muchos. Vacaciones, viajes, playa y bronceado están a la orden del día. Sin embargo, no para todo el mundo es igual de apetecible ya que con el verano llegan también las altas temperaturas que hacen que, hasta estar en espacios cerrados sea como estar dentro de una sauna. Cuando las temperaturas superan los 35 ºC es probable que, a pesar de estar dentro de tu casa, notes el calor por todos los rincones del hogar. Sin embargo, cada vez hay más herramientas y trucos para poder lidiar con ello.
Si quieres que tu hogar sea un lugar agradable este verano, en este nuevo artículo de unCOMO te vamos a contar cómo mantener la casa fresca en verano con estos sencillos 10 consejos que marcarán la diferencia.
Ventila por las mañanas
Uno de los principales hábitos que debes implementar en tu rutina cuando comienza a hacer calor, es abrir las ventanas cada mañana. De este modo, conseguirás limpiar el espacio y dejar que entre en casa el aire más fresco del día, a primera hora de la mañana.
También es un buen truco para poder estirar las sábanas y limpiar algunos restos de polvo ya que el aire, durante esos primeros momentos de la mañana, se estará limpiando y entrando fresco y limpio.
Crea espacios de sombra con las persianas y cortinas
Si has comenzado a airear y ventilar por las mañanas, otro de los trucos que debes hacer para mantener fría la casa es bajar un tanto las persianas cuando cierres las ventanas o, en su defecto, correr las cortinas. Los espacios con sombra y sin luz solar directa son mucho más frescos y agradables pero, si además lo haces después de ventilar, conseguirás que el aire fresco permanezca por más tiempo.
Evita tener las luces encendidas
Aunque lo recomendable es crear espacios de sombra en la casa, no enciendas las luces, aunque creas que hay mucha oscuridad. Parecen pequeñas, pero las bombillas eléctricas emiten calor cuando están encendidas y, con el paso de los minutos, este calor empieza a impregnar el ambiente, creando un aire cargado y cálido. En lugar de encender la luz, si necesitas un espacio más claro, es preferible bajar las persianas donde entra luz directa pero dejar las demás entreabiertas para que puedas ver sin problemas.
Refresca el espacio con plantas
Si aún te preguntas cómo mantener la casa fresca en verano, las plantas pueden ser la respuesta. No solo vuelven un ambiente acogedor y vivo sino que, además, las plantas pueden ser una buena ayuda para refrescar el hogar. Lo cierto es que si optas por plantas grandes de hojas verdes, en verano puedes regarlas o pulverizarles agua prácticamente todos los días, y esta sensación fresca acabará contagiándose por toda la casa.
Si quieres aprender a cuidar de tus plantas tal vez te interese este otro artículo de unCOMO sobre Cómo regar las plantas en vacaciones.
Duerme con las ventanas abiertas
En verano se debe aprovechar al máximo las horas frescas del día. Es por eso que por la noche, cuando más fresco suele hacer, lo que hay que hacer para mantener la casa fresca es dormir con la ventana abierta. De este modo, conseguirás crear un contraste con las horas de más calor y dejarás que la casa se airee y vaya expulsando el aire caliente del día y enfriando las paredes y espacios.
Opta por ventanas que aíslen de las temperaturas altas
Puede que pienses que unas ventanas con aislamiento térmico pueden ser demasiado caras pero, con el paso del tiempo, merece la pena el esfuerzo. Un buen aislamiento térmico tanto en paredes como ventanas pueden salvarnos tanto del frío en invierno como del calor en verano. Simplemente con mantener las ventanas cerradas en las horas de más calor, notarás la diferencia.
Evita usar mucho el horno
Lo cierto es que en verano lo que más apetece es tomar helados, ensaladas y productos frescos que nos ayuden a regular la temperatura. Sin embargo, si aún así eres un apasionado de la cocina, procura en la medida de lo posible espaciar el uso del horno. Como te imaginarás, este electrodoméstico es una auténtica bomba de calor que, ya no solo cuando se usa, sino cuando se ventila, expulsa una gran ola de aire caliente que puede arruinarnos el ambiente fresquito del resto de la casa.
En este artículo de unCOMO te enseñamos Cómo hacer cheesecake de fresa sin horno paso a paso.
Cambia más a menudo las sábanas
¿Hay una sensación mejor que meterte en la cama con las sábanas recién cambiadas? En verano es fundamental mantener una buena higiene doméstica ya que nuestros cuerpos suelen estar más sudorosos y eliminar más toxinas. Es por eso que se recomienda cambiar las sábanas una vez por semana. De este modo, si hace mucho calor, podrás darte una ducha antes de dormir y meterte en unas sábanas fresquitas y limpias.
Usa el ventilador o el aire acondicionado
Si, a pesar de todo, sientes que el ambiente de tu hogar está muy cargado y aún te preguntas cómo mantener la casa fresca en verano, una buena opción siempre es tener el ventilador encendido en las horas de más calor. De este modo, conseguirás que el aire se mueva y tendrás una sensación de frescor. El aire acondicionado también puede ayudar pero es un gasto mayor de electricidad. Tal vez de interese este artículo de unCOMO sobre Cómo enfriar la casa sin aire acondicionado.
Saca partido a los extractores de cocina
Los extractores de la cocina no solo sirven para eliminar el humo y los malos olores que dejamos después de cocinar, sino que también son perfectos para eliminar el calor de la casa. Su mecanismo no es otro que succionar el aire y, si el aire es caliente, acabará reparando un poco esta sensación. De este modo, conseguirás que el ambiente no esté tan cargado ni concentrado.
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