Cuidar de los utensilios de limpieza es importante para conseguir la máxima efectividad de su uso. La fregona o el mocho es una de las herramientas imprescindibles en todos lo hogares para limpiar el suelo, pero su eficacia depende de ciertos cuidados. Solo así lograrás que no desprenda malos olores, acumule pelo u otros deshechos y prolongar su vida útil. Algo tan básico como el cuidado de una fregona suele caer en el olvido de muchas personas. Por ello, a los pocos usos se encuentran con problemas por acumulación de suciedad.
Para descubrir cómo limpiar la fregona, por qué es importante mantener unos cuidados mínimos y cada cuánto es recomendable cambiarla, en unCOMO te recomendamos que sigas leyendo este artículo.
Cómo limpiar la fregona para que no huela
Los productos con los que habitualmente limpias el suelo usando la fregona, junto a las manchas que quitas, provocan una mezcla de olores muy desagradable en sus fibras. Por ello, para saber cómo limpiar el mocho y que no huela mal, sigue estos pasos:
- Llena un cubo de agua tibia o fría y añade jabón neutro. Como alternativa al jabón, puedes echar lejía y detergente.
- Mete el cabezal de la fregona en el cubo. Aunque existen diferentes tipos de fregonas como las de tela o las de microfibra, introduce esta parte por completo sea la variedad que sea.
- Usa unos guantes para frotar la fregona con la mezcla realizada en el cubo: hazlo con fuerza para eliminar los restos de suciedad y basura.
- Escurre la fregona, tira el agua sucia y llena el cubo con agua limpia.
- Ahora, añade al cubo dos vasos de vinagre blanco. Después, vierte el zumo de tres limones, introduce nuevamente la fregona y la dejas en remojo 3 horas. Gracias a la mezcla de vinagre y zumo de limón, eliminarás los malos olores del mocho.
- Transcurridas las tres horas, escurre la fregona para quitar el exceso de humedad y exponla al sol para que se seque. Los rayos solares contribuyen a eliminar el exceso de agua de los tejidos.
El vinagre blanco servirá para desinfectar, limpiar y blanquear la fregona. Además, junto al zumo de limón ayudará a eliminar el mal olor. Limpia el mocho de esta forma al menos dos veces a la semana, aunque es preferible hacerlo tras cada uso.
Conoce en estos otros artículos Cómo limpiar con vinagre blanco y Cómo limpiar con limón.
Cómo quitar los pelos de la fregona
En ocasiones se acumulan pelos y restos de basura en el mocho. ¿No sabes cómo quitarlos del todo? Aprende cómo limpiar la fregona de pelos con los siguientes consejos:
- Utiliza un cubo lleno de agua para mezclarla con lejía y detergente o jabón. Esta mezcla te ayudará a eliminar los pelos y el polvo de la fregona.
- Mete el cabezal de la fregona en el cubo y frota con mucha intensidad. Así, los pelos se desprenderán y quedarán en el agua. Escurriendo la fregona y desechando el agua sucia, lograrás que quede limpia de los restos de pelo.
- El uso de guantes es una medida de prevención para evitar el contacto con productos tóxicos utilizados en este proceso como la lejía o el detergente.
Por qué es importante limpiar la fregona
El uso de la fregona tiene un objetivo claro: eliminar la suciedad del suelo y limpiarlo. En cada fregado, los tejidos del mocho capturan la suciedad. Por lo tanto, si no se hace una limpieza frecuente de la fregona, esos restos de suciedad se quedan atrapados en sus fibras. Para evitar que la suciedad se quede impregnada en la fregona, es muy importante limpiarla después de cada uso. De esta manera evitas que ensucie más en lugar de limpiar cuando friegas con ella y que desprenda olores desagradables.
Recuerda que la fregona te servirá para limpiar el suelo de todas las habitaciones del hogar. Algo tan sencillo como limpiarla tras utilizarla será fundamental para que no arrastres la suciedad por las diferentes estancias ni dejes mal olor en cada una de ellas.
Cada cuánto cambiar la fregona
¿Sabes cuánto dura una fregona? La duración de esta herramienta de limpieza dependerá en gran medida del uso que le des y del mantenimiento que lleves a cabo. En general, el mocho tiene una vida útil de al menos un mes usándolo mucho, pero si lo limpias con frecuencia prolongarás todavía más su utilidad llegando a los dos meses en perfecto estado.
Si combinas el uso de la fregona con otros aparatos como la aspiradora, la mopa o un robot de limpieza, la duración se acercará todavía más a los dos meses o los superará. También es recomendable disponer de dos cabezales, o directamente dos fregonas, para dividir la limpieza del hogar en dos partes: uno destinado al suelo de baños y cocinas y otro para habitaciones, salones y pasillos.
Con los dos cabezales o fregonas consigues que cada una se encargue de un tipo de suciedad. En definitiva, no se mezclarán diferentes restos de suciedad en una misma fregona, contribuyendo de esta forma a que su duración sea mayor.
Tras conocer todos estos detalles, quizás quieras descubrir algunos Consejos para la limpieza del hogar y Cómo organizar la limpieza de la casa.