¿Tienes las paredes sucias y no sabes cómo limpiarlas? De igual modo en el que tenemos que ir limpiando los cristales para que nuestro hogar se vea limpio y en perfectas condiciones, las paredes también deben irse limpiando de forma esporádica para eliminar cualquier mancha que pueda surgir por el uso continuado de las estancias. Sobre todo si vives con niños, las paredes suelen resentirse sobremanera a causa de las manchas de pintura, bolígrafo, huellas dactilares, etcétera. En este artículo de unComo vamos a contarte cómo quitar la suciedad de la pared para que aprendas la mejor técnica que te ayudará a eliminar cualquier mancha y a que tu hogar vuelva a lucir limpio y perfecto.
Necesitarás:Para poder quitar la suciedad de la pared debes saber que no es una tarea tan sencilla como es pasar el polvo o el aspirador sino que requiere de una preparación y una elaboración un tanto más compleja. Lo primero que te recomendamos es que, para evitar dañar tus muebles, los cubras con sábanas o telas viejas que puedan evitar que la humedad el jabón caiga sobre ellos.
2Una vez tengas los muebles cubiertos y protegidos, vamos a preparar la solución casera para poder quitar la suciedad de las paredes fácilmente. Necesitarás:
- 4 litros de agua templada
- Detergente líquido
Si tus paredes están más sucias de lo normal o tiene mucha suciedad acumulada, entonces te recomendamos que, a la mezcla anterior, añadas estos ingredientes:
- 250 ml de vinagre blanco
- 250 gramos de sosa cáustica
- 250 ml de amoniaco sin detergente
Con estos productos conseguirás eliminar cualquier mancha, por oscura o incrustada que esté en tus paredes. Por otro lado necesitaremos otro cubo con agua limpia y que usaremos para aclarar el jabón que usemos, este agua deberemos irla cambiando a medida que veamos que se oscurece pues, de lo contrario, no terminarán de limpiarse completamente las paredes.
En estos otros artículos te contamos cómo quitar las manchas de bolígrafo de las paredes y en este otro cómo quitar las manchas de aceite de las paredes.
3Pero antes de ponernos a limpiar las paredes resultará imprescindible que eliminemos cualquier resto de suciedad y polvo que pueda haber en la pared. Es esencial que antes de aplicar el agua, elimines estas motas para evitar que la estancia se ensucie todavía más. La mejor forma de hacerlo es mediante un plumero ya que conseguirá eliminar la presencia de polvo en toda la zona y también en las paredes.
Si quieres una limpieza más profunda puedes pasar la aspiradora por la pared acercando únicamente el tubo alargador (es decir, quitando el pie de la aspiradora) para que así se lleve cualquier suciedad que pueda haber quedado en la pared. Este truco es perfecto para llegar a zonas más altas y eliminar posibles telarañas que puedan haber en las esquinas.
Otra manera de quitar el polvo de la pared es pasando un trapo limpio y seco o, si quieres llegar a zonas más altas, también puedes colocar el trapo en la escoba, envolviendo el cepillo, y barrer la pared.
4Una vez hayamos quitado el polvo, entonces es el momento de quitar la suciedad de la pared de forma completa. Pero, antes de nada, te recomendamos que pruebes la solución casera que hemos preparado en una zona oculta de la pared (tras la puerta, por ejemplo); de esta manera comprobarás que no produce ningún efecto adverso que no hayamos contemplado.
Si la pared se muestra intacta, entonces procederemos a limpiarla. Para ello tendremos que meter la esponja dentro del cubo de limpieza y frotaremos suavemente la pared para eliminar las manchas que estén visibles. Un truco: para evitar los chorretones, lo mejor es que limpies de abajo hacia arriba y si ves que hay gotas que se caen, puedes limpiarlas con la misma esponja. El resultado es mucho más apurado si lo hacemos de este modo.
5Una vez tengamos toda la pared fregada con el detergente que hemos preparado, entonces deberemos proceder al aclarado. Para ello tendremos que coger trapos limpios e ir eliminando el jabón mojándolo en agua; deberemos ir restregando toda la pared hasta que el trapo absorba el jabón, escurrir y volver a mojarlo en el agua limpia. Si ves que el trapo se ha ensuciado, cámbialo y usa uno nuevo pues, así, conseguirás eliminar correctamente la suciedad de las paredes.
Lo mismo deberás hacer con el agua: cuando veas que este cubo contiene agua que se ha oscurecido, cámbiala por una nueva para que la limpieza sea total. Si quieres, también puedes hacer este proceso con una fregona en lugar de un trapo, es un método más rápido de limpiar la pared y, además, te permitirá llegar a zonas más altas.
6Si tienes las paredes pintadas en blanco, una de las mejores soluciones que existen actualmente para quitar la suciedad de la pared es lo que se conoce como "borradores mágicos". Son unas esponjas especiales que pueden eliminar manchas de cualquier superficie pero, eso sí, deberá ser con un fondo blanco porque de lo contrario podría estropear la pintura o el papel pintado, si es que tu casa está decorada de esta forma.
Para usar este tipo de esponja bastará con que la sumerjas en agua limpia y, después de escurrirla, la frotes sobre la mancha en cuestión que quieres eliminar de tu hogar. Al igual que haría un borrador, esta esponja es capaz de eliminar cualquier rastro de suciedad sin necesidad de limpiar toda la pared.