A la hora de lavar la ropa, hay manchas que cuestan más o menos de sacar. Los diferentes tipos de sustancias que pueden haber en la mancha, junto a la combinación del tipo de tela, hacen que muchas veces nos volvamos locos para eliminar ciertas marcas. A veces, incluso pensamos que no tiene solución y optamos por desechar esa prenda de ropa. ¿Te ha pasado alguna vez que has dejado la plancha un poco más de lo que debías y se ha quedado la marca? Es algo bastante común, pero solemos pensar que esas manchas de quemaduras no van a salir de nuestra ropa y, la mayoría de veces, optamos por tirarla o reciclarla para trapos. No es necesario deshacerse de ella, por ello, a continuación te contamos que las manchas de quemaduras, ya sean de plancha, de cigarrillo o de otros tipos, tienen solución. ¿Quieres saber cómo? Continúa leyendo este artículo de unCOMO en el que te explicamos cómo quitar manchas de quemaduras en la ropa.
Actúa con rapidez para eliminar manchas de quemaduras en la ropa
Si te ha pasado que se te ha manchado una prenda de ropa con la plancha, no sigas con la tarea y dejes de lado la quemadura. Es importante actuar con rapidez para que la mancha salga lo mejor posible, o podría quedar un daño irreparable.
No importa si vas a usar el método convencional de lavado o algún remedio casero (ambos detallados en este artículo), es importante que la alejes de la fuente de calor que le ha provocado la mancha cuanto antes y que la trates cuánto más rápido mejor.
Tratar las manchas de quemaduras en la ropa
Puedes lavar la ropa como haces convencionalmente, sin utilizar otro tipo de remedios caseros o sustancias. En este caso antes de meterla en la lavadora has de tratar la ropa quemada de la siguiente forma:
- Primero, debes enjuagarla con agua tibia para que absorba mejor el detergente.
- Frótala después con el detergente que uses normalmente. Haciendo esto potenciarás la acción del detergente para que después se lave mejor.
- En este caso, es preferible un detergente líquido, que funciona mejor que uno en polvo. Puedes utilizar en polvo si es el que usas, pero entonces mézclalo con agua para formar una pasta.
- Opcionalmente también puedes remojarla en lejía una vez la hayas frotado. Eso sí, siempre y cuando la tela lo soporte, ya que no todos los tejidos son adecuados para usar lejía. Las lanas, seda y telas que destiñen no suelen meterse en lejía. Si no estás segura de si es un material que puedes meter en lejía lee las etiquetas o evita hacerlo.
- Mezcla la lejía con agua y nunca eches demasiada.
- Déjala en remojo durante 15 minutos si lo haces.
Lavar ropa con manchas de quemaduras
A continuación, sigue estas indicaciones para lavar la ropa para quitar las manchas de quemaduras:
- Después de este proceso de tratamiento y preparación llega el momento de lavarla.
- Ponla en la lavadora con el ciclo normal, es decir, lo que recomienden en la etiqueta.
- No hace falta que pongas una lavadora solo para esta prenda, puedes aprovechar alguna ropa sucia. Eso sí, ten cuidado de que todas las prendas puedan lavarse con esa configuración.
- Cuando termine de lavarse y el centrifugado, finalmente, tiéndela al aire libre. Es mejor que se seque a la luz del sol que en una secadora, ya que los rayos del sol aclaran las manchas.
- Sin embargo, debes tener en cuenta de no dejarla al sol más de un día o la tela podría debilitarse.
- Si notas que sigue manchada lo más seguro es que sea menos visible, así que puedes repetir el proceso de lavado varias veces.
Si continúa igual que antes, puedes probar alguno de los remedios caseros para quitar las manchas de quemaduras en la ropa que te mostramos a continuación.
Peróxido de oxígeno o agua oxigenada
El agua oxigenada se ha convertido en el remedio más usado por su eficacia, ya que tiene propiedades blanqueadoras y es un truco muy sencillo de realizar.
Solo debes coger un trapo viejo o una tela que no vayas a usar y mojarla con agua oxigenada. Coloca la prenda dañada sobre una superficie plana. Coloca encima el paño mojado con agua oxigenada encima otro paño que esté seco. Ahora plánchalo por encima del trapo seco con una temperatura media. Ve mirando cómo va la mancha, puede tardar unos minutos. El peróxido de oxígeno con el calor harán que la mancha desaparezca. Si ves que el paño mojado se seca vuelve a remojarlo en agua oxigenada y prosigue con el planchado. Del mismo modo, puedes sustituir el paño seco por otro si ves que se moja con el peróxido de oxígeno. Es un método efectivo, sobre todo, en prendas de algodón o lino.
Limón
El jugo de limón recién exprimido también es muy efectivo. Tienes que exprimir el jugo de un limón sobre la mancha y después sumergir la prenda en un recipiente con agua caliente. Déjala en reposo en el agua durante 15 o 30 minutos. Después escurre el máximo de agua de la prenda y tiéndela, dejándola secar al sol.
Es recomendable no utilizar este remedio con prendas que no sean aptas para la lejía ya que, aunque los efectos del limón son menores, en realidad, son muy parecidos y podrías causar daños en ese tipo de prendas.
Vinagre blanco
Otro remedio para eliminar las manchas de quemadura en la ropa es mojar una esponja en vinagre blanco y frotar la mancha. Luego, déjala reposar de 10 a 15 minutos y enjuágala con agua fría. Finalmente déjala secar al aire libre y listo. En este caso es importante que el vinagre sea blanco y no de otro tipo.
También puedes reemplazar el peróxido de oxígeno del primer truco por vinagre blanco y hacer lo mismo.
Agua helada
Se dice que el agua helada puede ayudar a limpiar mejor la mancha de una quemadura. Para ello, en cuanto notes que la prenda se ha quemado métela en un barreño con agua muy fría o helada durante una hora. Tiene que conservarse así, por lo que puedes meterle hielos o en su lugar ponerla en el congelador. Luego procede a lavarla en la lavadora de forma normal.
Lima de uñas
Cuando las manchas son muy fuertes o si son prendas más duras, como la lana, un truco es usar una lima de uñas para raspar la mancha. También valdrá algún tipo de raspador, siempre y cuando sea suave, como un papel de lija. Ten cuidado al frotarla y no lo hagas muy bruscamente o podrías dañarla. Luego lávala como haces normalmente.