El planchado se realiza una vez terminado el lavado de las prendas y el secado. No todas las prendas requieren ser planchadas, pero si lo prefieres puedes planchar desde las camisas hasta los calcetines. Principalmente se planchan las camisas, camisetas, trajes, algunos pantalones dependiendo del material, ropa del hogar... Para conseguir un acabado perfecto, se requiere una plancha y la tabla para poner la ropa. Si quieres saber más mira el siguiente artículo de unComo, trucos para planchar la ropa.
Necesitarás:Antes de empezar a planchar tienes que tener en cuenta la temperatura de la plancha, separa aquellas prendas que necesitan un mayor planchado y por último mira las etiquetas de las prendas para saber si se puede planchar y, en caso de poderse, con qué condiciones si es que las hay.
2Una vez conozcas estos detalles, pasamos a realizar la preparación del planchado. Primero, es recomendable humedecer las prendas con un pulverizador o la propia plancha, si dispone de esta funcionalidad. Luego tienes que encender la plancha y dejarla un rato para que se vaya calentando.
3A continuación te presentamos algunas técnicas para planchar las distintas prendas de ropa; nos centraremos en las camisas, pantalones y ropa del hogar. Si llevas a cabo estos consejos, te ahorrarás tiempo, esfuerzo y te será más fácil el planchado.
4Camisas: Antes que nada, tienes que planchar el cuello desde el extremo hasta el centro y se debe planchar por los dos lados. Luego plancha los puños. Una vez hecho estira las mangas hasta que no quede ninguna arruga y plánchala de abajo hacia arriba. Por último, plancha el cuerpo de la camisa. Para un mejor planchado empieza por un lateral y termina por el otro.
5Pantalones: Primeramente, plancha la zona de los bolsillos y la cintura. Continúa por la parte de las piernas (perneras). Lo último que se plancha en un pantalón son los dobladillos. En caso de que los pantalones sean de vestir, usa un paño de algodón sobre la tela para así no sacarles el brillo.
6Ropa del hogar: Para empezar plancha los lazos, dobladillos... Si lo prefieres puedes doblar las toallas o sábanas antes de planchar. Una vez planchados los dobladillos y estas zonas, deberás proseguir con lo que queda de la prenda.