Doblar las camisas de vestir en lugar de colgarlas no solo liberará preciosos centímetros de espacio en el armario, sino que ayudará a reducir las arrugas (y el temido tiempo de planchado). Sigue los sencillos pasos de este video para lograr un pliegue plano y prolijo.
Lo que necesita
Siga estos pasos
- Extiende la camisa, asegurándote de que esté abotonada Abotonar completamente la camisa asegurará un pliegue ajustado y sin arrugas.
- Doblar las mangas a la mitad de la espalda Dobla cada manga horizontalmente, de modo que los puños crucen sobre el centro de la espalda. Tenga cuidado de no doblar las costuras laterales de la camisa.
- Dobla los lados hacia el centro Dobla ambas mangas nuevamente, esta vez acercando las costuras laterales de la camisa de manera uniforme desde el hombro hasta el dobladillo, de modo que se unan debajo del cuello, formando una V ancha allí. (Los lados no necesariamente se encontrarán más abajo en la camisa).
- Doblar por la mitad a lo largo Sosteniendo la parte inferior de la camisa con las dos manos, dóblela por la mitad a lo largo de abajo hacia arriba, de modo que el borde inferior de la camisa descanse debajo de la parte inferior del cuello. (Haga esto una o dos veces, según el largo de la camisa y la profundidad de su espacio de almacenamiento). Voltee la camisa doblada y guárdela.